Expertos del IDPC llevan a cabo actividades de socialización con la comunidad, a medida que avanza la recuperación de la escultura ‘Alameda’, original del artista Bernardo Salcedo, instalada en diciembre del año 2000 en la Alameda El Porvenir, barrio La Libertad, al occidente de Bogotá.
Famosos por adornar caminos, templos y palacios en Europa y Asia, e innumerables castillos en el cine, los cipreses son sembrados como árboles ornamentales, tienen forma de cilindro ovalado y alcanzan hasta 20 metros de altura.
En Bogotá, aunque no embellecen palacios, la Alameda El Porvenir en Bosa tiene su propio ‘bosque de cipreses’, gracias a la escultura de hierro y acero Alameda, en la calle 59 sur con carrera 109, intervenida por el IDPC desde febrero de 2020.
El proyecto de restauración de la obra de Bernardo Salcedo, de 18 metros de largo y 6 de alto, está en la etapa de recuperación de las partes oxidadas del monumento, mediante injertos metálicos y restauración de la escultura en taller. Allí, el equipo de recuperación desarrolla un procedimiento llamado sandblasting – o wetblasting– (‘explosión de agua o arena’), para eliminar los restos de grafiti, rayones y otras marcas ajenas a la estructura original.
Como proceso, el sandblasting consiste en limpiar el metal a presión con potentes chorros de arena y agua, lo cual también remueve del metal los daños que causa la corrosión del clima y el paso del tiempo, llamados ‘costras’.
Este procedimiento además prepara la superficie para la aplicación de la patina de acabado y protección (procesos químicos de envejecimiento artificial), que le darán a la escultura un acabado estético final uniforme, en línea con la intención formal original del artista.
Adicionalmente, el IDPC socializa los procesos de socialización de la conservación del monumento con la comunidad. Según Giovanna Barón, arquitecta supervisora de la obra, “esta acción permite que la comunidad interiorice el significado de la pieza artística en el entorno, el tiempo y espacio público, así como sus aspectos cualitativos y cuantitativos, características para ser un Bien Mueble de Interés Cultural. Asimismo, la socialización permite el diálogo cultural y la creación de memoria en la localidad, generando comportamientos de apropiación y pertenencia, así como y el disfrute y la buena relación entre el ser humano y su ciudad´.
De manera paralela, el IDPC está llevando a cabo la finalización del pedestal sobre el cual la escultura quedará instalada. Esto evitará tanto los empozamientos de agua en la base de la instalación, como las afectaciones biológicas que aquello genera.
El proyecto lleva hasta el momento un avance de ejecución del 36 por ciento y su entrega está proyectada para finales del mes de septiembre del año en curso. En 2019 había sido intervenida con una limpieza preventiva.
Conoce el proyecto de restauración de la escultura Alameda en la siguiente galería de fotos