El Parque Arqueológico y del Patrimonio Cultural de Usme fue escenario de distintas actividades, el jueves 21 de marzo de 2024.
El día comenzó a las 5:00 a.m. con la celebración del equinoccio de primavera. Allí, como parte de la estrategia de armonización cultural del Parque, representantes de comunidades indígenas, campesinas y jóvenes de Bogotá se reunieron en una ceremonia ritual de limpieza espiritual en la que se celebró el inicio del nuevo ciclo solar que da apertura al calendario tradicional.
Posteriormente, integrantes de la Mesa Usmeka recibieron en el círculo de palabra al equipo del Instituto Distrital del Patrimonio Cultural (IDPC) y a su director general, Eduardo Mazuera, a quien le dieron la bienvenida al territorio con la entrega de una mukura que recoge el trabajo espiritual del espacio. Allí, los asistentes reafirmaron su disposición al diálogo y al trabajo conjunto por la Casa del Pensamiento, proyectado como un espacio de encuentro y diálogo de saberes interculturales.
Finalmente, el Parque recibió la visita del secretario de Cultura, Recreación y Deporte, Santiago Trujillo, quien tuvo la oportunidad de recorrer este lugar, que es producto de la movilización social y ciudadana al permitir la protección integral del hallazgo arqueológico, orientándolo hacia el reconocimiento de las múltiples formas de vida asentadas en los territorios rurales de Bogotá.
En junio se cumplirán 10 años de la declaratoria de la Hacienda El Carmen como Área Arqueológica Protegida de orden nacional, consolidándose como un espacio que:
Pone de presente el pasado de Bogotá y nos permite reconocer un territorio que ha sido habitado desde hace más de 2.000 años.
Busca posicionarse como un proyecto estratégico para el ordenamiento territorial del borde urbano-rural suroriental de la ciudad.
Hace parte de la protección y del reconocimiento de los legados de la ruralidad, mediante la creación de estrategias innovadoras orientadas a la construcción colectiva de conocimientos sobre la historia de los territorios que hoy componen Bogotá.
Es un escenario pedagógico, cultural y científico que promueve la construcción participativa de conocimientos sobre la ciudad.
Propicia encuentros y diálogos interculturales; fortalece los tejidos sociales del borde sur, y garantiza la apropiación de los territorios rurales a partir del reconocimiento de su diversidad.
Evidencia la riqueza natural de la localidad, que al finalizar su proceso de restauración ecológica, permitirá conectar a través de senderos las rutas para el avistamiento de aves, reptiles y anfibios, así como las especies de un ecosistema nativo.
Propone a la cultura y el patrimonio como eje de desarrollo territorial.
