El Consejo Distrital de Patrimonio Cultural aprobó la postulación para incluir “los procesos y metodologías de la Creación Colectiva del teatro La Candelaria, su uso y proyección artística y social” en la Lista Representativa del Patrimonio Cultural Inmaterial del ámbito distrital (LRPCID). Se trata de una manifestación cultural que ha tenido uno de sus principales desarrollos en Bogotá a través de la producción de obras que son hitos del teatro colombiano. De la misma forma, ha sido apropiada por diversos grupos artísticos y sociales de la ciudad y contribuye a mantener viva la memoria social y política del país, constituyéndose en un importante aporte desde el teatro para la ciudadanía.
El Instituto Distrital de Patrimonio Cultural de Bogotá (IDPC) viene realizando el acompañamiento técnico al Teatro La Candelaria Santiago García desde el segundo semestre del año 2020 con el fin de construir el documento de postulación de esta práctica cultural a la LRPCID. Este proceso también ha contado con el acompañamiento de la Gerencia de Arte Dramático del IDARTES, debido a la importancia de la Creación Colectiva para las Artes Escénicas en la ciudad. En conjunto con el Teatro La Candelaria y otros grupos de teatro de la ciudad, se han desarrollado hasta hoy más de cuarenta actividades, incluidos talleres, grupos focales y encuentros de intercambio de saberes, entre otros, con este propósito.
Esta es una iniciativa que surge de la necesidad de reconocer y visibilizar los impactos de la Creación Colectiva y el Teatro La Candelaria en el campo artístico y en el desarrollo de una dramaturgia de la ciudad y el país, para así, evidenciar a la Creación Colectiva como un bien social, con un valor que atraviesa la identidad de este grupo de teatro. Así mismo, constituye una apuesta por incidir y transformar las políticas culturales en sectores más allá del cultural, ya que es una herramienta importante para fortalecer procesos pedagógicos y generar acciones que contribuyan a la construcción de paz y tejido social. De igual manera, el IDPC reconoce que la inclusión en la lista representativa no es el fin, sino el principio de un proceso social que busca la garantía de los derechos culturales y el mejoramiento de la calidad de vida de quienes hacen parte de esta práctica cultural.
Con la presentación de la postulación y su aceptación por parte el Consejo Distrital de Patrimonio Cultural se inicia el proceso formal de inclusión en la Lista Representativa de Patrimonio Cultural Inmaterial del distrito, dando vía libre al proceso de formulación del Plan Especial de Salvaguardia (PES), el cual favorece, entre otros, la creación de una red de portadores, grupos artísticos, organizaciones sociales y gestores culturales de la manifestación, que actúe de forma cooperativa en la gestión, difusión, posicionamiento y salvaguardia de la Creación Colectiva, en aras de su sostenibilidad artística y social. Además, el PES será una oportunidad para generar alternativas de sostenibilidad financiera de la manifestación (acordes con las formas de creación de los grupos de teatro de la ciudad), así como para amplificar los efectos de la Creación Colectiva en Bogotá.
Surgimiento de la Creación Colectiva y del Teatro La Candelaria
El surgimiento de la Creación Colectiva en 1968, fue producto de un laboratorio de investigación teatral realizado entre el Teatro La Candelaria de Bogotá y el Teatro Experimental de Cali (TEC). A partir de múltiples encuentros y talleres, se realizaron las primeras reflexiones conceptuales como proceso y como método para la creación de obras de teatro.
La Creación Colectiva jugó un rol determinante en la conformación del Movimiento del Nuevo Teatro, así como de grupos de teatro y en la creación de obras de dramaturgia nacional. Así mismo, fue, en parte, la manera de llevar a cabo una de las apuesta del Nuevo Teatro que buscaba transformar las formas de la producción teatral, salir de las relaciones jerárquicas donde los actores obedecían la voluntad del director.
Construir un nuevo sistema de creación implicó construir relaciones horizontales y trabajar bajo los intereses del grupo de creadores y creadoras. Fue, además, un eslabón determinante que le dio a la tradición teatral naciente una identidad, pues una de las grandes virtudes de esta forma de creación es que consigue plasmar de manera genuina las voces de quienes participan en ella.
El Teatro La Candelaria es indudablemente un grupo pionero para el inicio y consolidación de la metodología de la Creación Colectiva, la realidad es que pueden entenderse como procesos paralelos, ya que la conformación del Teatro la Candelaria como un grupo estable estuvo apoyada en el desarrollo de esta metodología. El grupo se fundó a mediados de los sesenta, el 6 de junio de 1966, y tiene en su historia el haber sido el primer grupo que asume el teatro de manera independiente, con una sede propia, un repertorio y la realización de temporadas permanentes.
Toda la actividad cultural desarrollada por La Candelaria hizo que en muy poco tiempo el grupo se consolidara con gran liderazgo. Es así como un año después de fundado La Candelaria, comenzaron a aparecer otros procesos similares dedicados a la investigación y a la experimentación teórico-práctica, y esto permitió que la Creación Colectiva fuera adoptada y desarrollada rápidamente como una forma de trabajo. Así, muy pronto el país entero se llenó de grupos independientes integrados por campesinos, estudiantes y trabajadores y podríamos decir que el teatro se convirtió en una necesidad social.